En
este horrible mundo en el que estamos,
en el
que nos hallamos,
del
cual no podemos huir
ni
salir sin ser seguidos o espiados.
Obedeciendo
al señor
sin un
especial uso de razón
enjaulados
como si tal anduviéramos
en una
confusión.
Solamente
cuando se pierde todo
siempre
hay un momento exacto
para
comportarnos como si tal.
Este
es nuestro mundo.
Ahí es
donde vivimos en esta tierra
de
nadie, sórdida y violenta bajo
la
sombra de la muerte.